¿PRIMERA CLASE?? =VUELO EJECUTIVO.
Se llegó nuestro turno: Señorita Claudia T. pase. Mostré de nuevo todo mi papelero que traía, boletos, Passport, etc. Me dijo la encargada, -Por favor, espere de este lado veremos sí otro lugar se desocupa, lo mismo le dijeron al chavo, otro rato esperando juntos, mirando al cielo, bueno al techo moderno… hasta que terminó la fila, checaron y nosotros ashhh como la hacen de emoción deveras, -pasen- nos dijo la señorita miren asi está a situación, ya no hay lugares en avión económico:(, sólo en avión EJECUTIVO:) Y ya se va a ir, se van a ir los 2, en ése sí hay lugares exra.Y los dos:- en serio???? -Yeeeeeeeah y la chocamos.
Entonces nos tocó irnos en avión ejecutivo, y sin pagar la diferencia, supongo que fue la mínima recompensa por pasar la madrugada esperando en ese frio lugar, en esa banca dura, con la tensión de no saber qué esperar. Bueno lugar 14c, me tocó. 14a le tocó. Hora de iniciar un nuevo recorrido hacía panamá de allí transbordar otra nave celestial.
Recordé que nunca me había subido a un avión… pero seguí el pasillo, el chavo se quedó con la señorita revisando sus papeles yo me di prisa, no quería que me pasara lo mismo de nuevo… le pregunté al policía ¿qué hago a dónde voy?- Cup Airlines?- si.. siga… ya empesaban a hablar con el acentíto colombiano jeje, primero tuve que echar todas mis cosas en una bandeja para que otro policía las revisara, me sacaron mis tijeritas!! Pero luego me las regresaron, después a que pasaran mis cosas por unos rayos X, al decir verdad estaba poquito nerviosa pero más bien era la emoción, luego seguí el pasillo con grandes ventanales de vidrio del aerport elegante de Mexico, mucha gente. Mientras nombraban por el micrófono mi numero de ticket entré al duty free, cuántos perfumes y libros y peluches y recuerditos mexicanos pero nop no quería gastar aún, luego llegó mi “amigo” el de la maleta de rueditas, mietras que yo, ya no tenía la maleta porque no se por qué me la guardaron desde que iva haciendo fila y no la volví a ver hasta colombia sabe por donde la mandarían… per fue buen aliviane… se llegó la hora de abordar el chaval me dijo no te van a dejar entrar con tu bolsa del lonche que dejaste tirala! Pero que creen nadie se dio cuenta y mi lonche y mi agua entraron como si nada en mi bolsa. No es tan difícil hacercelos tontos jejeje.
Subí a l avión, ¡qué elegante! Pensé… pantallitas por aquí por allá buscamos nuestros lugares nos tocó cercas, en mi lugar me encontré una almohadita, una cobijita, una toalla, audífonos a los lados, air conditioning, revistasa y ooh yo no sabía que pfff muchas cosas….no sabía qué tocar y qué no, sentía miedo que sí fuera a agarrar algo lo desvarataría.
A un lado de mi iva el capitán del avión osea si, creo que iva supervisando que todo funcionara bien como sí fuera pasajero… asi que las asafatas siempre ivan primero a nuestros lugares vigilando que todo estuviera correcto, me tocó el lugar de salida de emergencia, un lugar peculiar. También iva un gringow al otro ladow Reading a very interesting magazine that then he would lend me… bla bla. Enseguida pues, ya saben los expertos no? las asafatas pasan al frente y dan las indicaciones de como usar el salvavidas, la mascarilla de aire en caso de accidentes el sit belt etc.
Varias veces venían pensamientos a mi mente….pensamientos de ¿qué estoy haciendo yo aquí?, ¿por qué vengo yo solita?, ¿y mis compañeros?, ¿Y si me pierdo a lo lejos? Y sí no vuelvo? Dónde está mi mamá? Luego pensaba en Dios, se que todo lo que El permite que suceda tiene un propósito y ésta vez Dios me enseño grandes cosas: a sobrevivir, a valorar lo que me ha dado, a querer más a mi familia, a seguirle incondicionalmente, a entregarle todo de mi sin escatimar, a tener Fe, a amarlo sobre todas las cosas, a mirar su grandeza, a sentirme la más pequeña de sus hijas, pero también la más amada, la más querida, la más vigilada, observada, consentida, a ver su cielo infinito que mis ojos no alcanzan a contemplarlo, el azul del mar. los rayos del sol traspasar lo bello de las nubes, a valorar mis sentidos, disfrutar, admirarlo quererlo, Volar fue un momento íntimo con Dios… luego no saber hacer nada, no poder hacer nada más que llorar, rendida de agradecimiento por la vida.
Volví de mi transe espiritual cuando una azafata pasa con el carrito de la comida mmm! Yo que esperaba comerme mi lonche que guardé de la mañana pues noo un super plato bien surtido ensalada, carnita, verduras, mayonesa, adereso.. vengan a mi y de bebida lo que yo quisiera pues desde jugo hasta vinos… qué simple Claudia, yo sólo quise coca, sii tampoco sabía que del respaldo del asiento delantero se desprende una mesita para que allí ponga mi plato aa que emoción jajaja. Era raro ver que fui la única medio emocionada porque todo era novedad para mi sólo tenía que fijarme bién qué hacían los demás.
De rato fui al baño y escuché a alguien que me saludaba –mijaa mijaa acá somos nosotras- eran las educadoras de puebla que conocí en las banquitas del aeropuerto, que también ivan camino a Colombia a una conferencia de educadoras jubiladas,… creo. Pensé algún dia me jubilaré como ellas parecía que me miraba en un espejo 40 años mayor… total no me imaginé que nos tocaría el mismo vuelo, mucho gusto señoras! Algo me decían pero no recuerdo, suerte, tal vez. Gracias por sus palabras de aliento.
ClAuDiA
